lunes, 14 de junio de 2010

¡Y se hizo justicia en Llano…!


Habitantes de esa comunidad lograron a base de intensa presión cerrar planta de chapopote que ponía en peligro la salud de los habitantes del poblado, aun cuando las apuestas eran de pronóstico reservado

Por Claudio Tiznado
Y se llegó el día. Habitantes de Estación Llano lograron cerrar en forma definitiva la planta de chapopote, que ponía en peligro la salud de la población y que tenía operando alrededor de seis meses con total impunidad.
La clausura no oficial se logró la semana pasada, luego de que unas 150 personas de esa comunidad entre adultos, personas de la tercera edad y estudiantes de la Telesecundaria local se plantaron frente a las instalaciones de dicha compañía para presionar el cierre alegando problemas de contaminación.
Los manifestantes se apostaron en la entrada de las instalaciones de Constructora Mas de Navojoa, para impedir el ingreso y salida de tracto camiones cargados de grava y chapopote, lo que paralizó sus actividades prendiendo los focos de alerta entre sus directivos que no creían lo que estaban presenciando.
Es la primera vez en su historia que dicha comunidad se manifiesta contra las acciones de terceros que afectan su calidad de vida; durante los poco más de 100 años de existencia de Estación Llano siempre ha sido ninguneada por la cabecera municipal, quien en contadas ocasiones los ha apoyado en sus legítimas demandas. En esta ocasión el ayuntamiento de Santa Ana mostró su respaldo público al pueblo al no obstruir el paro.
Desde hace medio año la empresa denominada Constructora Más, se encontraba contaminando el medio ambiente del lugar al mezclar arena con aceite caliente. Dicho proceso de combustión propicia que se esparzan por aire enormes columnas de humo visibles desde cualquier parte.
Las actividades de dicha compañía acentuaron los problemas respiratorios entre su gente, sobre todo en los niños y ancianos. Además la irritación en los ojos es otro de los padecimientos más fuertes, lo que propició la indignación de los habitantes que finalmente lograron cerrarla.
De acuerdo a un reporte de la autoridad municipal dicha empresa ya debía haberse reubicado a varios kilómetros a la redonda, pues ya se había sostenido un compromiso con Rafael Félix Ross, representante de la empresa Constructora Más.
Además, trascendió que la planta de chapopote contaminaba porque además de no darle mantenimiento para reducir los costos, también se utiliza un material químico hulado que se funde con el chapopote para que al pegarlo en la carretera, esta no se parta.
Y para Ripley, el pasado viernes, burdamente, cuando ya la empresa anunciaba que cerraba en forma definitiva para buscar una reubicación, se apareció un empleado de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) para hacer una evaluación de impacto ambiental, a lo que personal de la planta le dijo que ya no tenía nada que hacer ahí.
Un dato curioso: El delegado de Profepa Rafael Carlos Quiroz Narvaez también es de Navojoa al igual que el dueño de Constructora Más Uriel Silva Bours, pues fue alcalde de aquella población y hoy se encuentra incrustado en el “Nuevo Sonora” del gobernador Guillermo Padrés Elías.